Es cuestión de ‘MoJo’

Estar en el lugar adecuado, en el momento adecuado y, además, tener el olfato periodístico bien afinado, dejó de ser suficiente.
Los tiempos que corren demandan sacarle brillo a tu MoJo. Y no, no me refiero a ese encanto o mojo que algunas personas tienen para atraer la buena suerte, sino a pulir tus técnicas de Mobile Journalism, término usado en 2005 por Jeff Jarvis, profesor de la Universidad de NY, para explicar la dinámica del trabajo periodístico con dispositivos móviles.
Mejor ir flojito y cooperando.

«La capacidad de adaptación parece surgir como condición necesaria para moverse en los entornos de trabajo móvil», señala Anahí Lovato en su texto Periodismo ubicuo, parte del libro Reflexiones móviles: El periodismo en la era de la movilidad.

Y puesto que la tecnología móvil evoluciona a gran velocidad, el periodista se enfrenta, al menos, a un tercio de retos a los que es imprescindible adaptarse ya:

  1.  Aprender a utilizar nuevas plataformas y gadgets.
  2. Agudizar su habilidad para corroborar la información generada, incluso por  los usuarios o audiencia.
  3. Contar historias de la forma más creativa posible, sin perder rigurosidad informativa.

Saber hacer periodismo móvil, de calidad, actualmente es vital para satisfacer las necesidades informativas de la audiencia.

Sin duda creo que es la forma de seguirse asegurando un espacio en las redacciones de hoy o de emprender proyectos de comunicación propios.